Después de montón de aventuras por un mundo donde todo puede pasar, por fin he terminado esta colorida saga. llamada "Las crónicas de Narnia". Y digo por fin, no porque estuviera deseando de que acabara, sino porque tenía muchas ganas de saber cómo terminaba. Y como suele acostumbrar, el autor da por finalizada la historia con un argumento cargado de una fantasía capaz de superar límites idealistas.
Siempre voy a tener un cariño especial a esta saga porque es la que verdaderamente introdujo la afición por la lectura dentro de mi rutina. No digo que fuera el primer libro que me gustó, al cual también le tengo gran aprecio y del cual algún día hablaré, pero este fue el primero con el que dije: "Si parece que soy yo la que estoy ahí". Yo de pequeña siempre decía que no me gustaba leer y, rondando los 16 años, en la típica tarde que no tienes nada que hacer, se me ocurrió de repente leer una página de "El sobrino del mago" por Internet. Algo raro en mi porque normalmente iba directa a ver películas, no a leer libros. La cuestión es que me enganchó, así que me compré el primer libro de esta fabulosa heptalogía. Como cabía esperar, salí bastante contenta cuando lo terminé, y al poco tiempo mi madre ya me tenía preparados los otros 6 libros (como siempre tan atenta jejeje).
Están escritos por Clive Staples Lewis y son 7 libros. Tienen un orden de publicación diferente al que realmente están aconsejados leer. Por ello las editoriales hicieron en su día una nueva edición con el orden correcto para un mayor disfrute y mejor entendimiento. El orden sería el siguiente:
- 1º -- El sobrino del mago
- 2º -- El león, la bruja y el armario
- 3º -- El caballo y el muchacho
- 4º -- El príncipe Caspian
- 5º -- La travesía del Viajero del Alba
- 6º -- La silla de plata
- 7º -- La última batalla
Cada uno de ellos tiene una historia fantástica basada en el esfuerzo del bien para enfrentarse al mal. A lo largo de los libros van apareciendo diferentes personajes, e incluso los protagonistas varían. De este modo no se hace tan monótono. El que nunca cambia es el gran "Aslan". El león cuyo rugido casi parece penetrar en mis oidos.
Todos tienen su encanto, pero yo me quedo con "El león, la bruja y el armario". Me produjeron mucha ternura los personajes como Lucy, Peter, Edmund, Susan y los diferentes animalillos como los castores. También me gustó mucho que Narnia fuera invadida por la nieve, ya que un paisaje blanco es un deleite para mis ojos, o en este caso mi imaginación. Pero todos los libros en mayor o menor medida me han introducido un espíritu liberador y un paraíso para poder correr, saltar, volar y hasta charlar con seres de 4 patas.
Se han hecho versiones adaptadas al cine de algunos de estos libros, pero nunca me he animado del todo a verlas porque realmente para el tema cinematográfico tengo otros gustos. Me gusta mucho leer este tipo de libros de carácter más infantil-juvenil, pero las películas me suelen resultar demasiado infantiles y previsivas. Y, a pesar de que el cine siempre ha sido uno de mis grandes entretenimientos, con éste tipo de historias prefiero recrearme en la inspiración de las letras.
Si nunca habéis pensado en empezar esta saga os alento a que le deis cabida en vuestros ratos libres. No os guiéis por quienes dicen que es para niños. Este tipo de gente es la que nunca experimentará sensaciones que no pueden ser factibles en nuestro mundo real. Así que, ¡viajemos todos a Narnia, la tierra donde todo puede suceder!